Toda sociedad necesita de catarsis periódicas. El carnaval genera el desorden que mantiene el orden el resto del año. Las penas y privaciones de cada día se soportan mejor porque sabemos que, dentro de más o de menos tiempo, vienen las fiestas. Pues bien, nuestra pequeña comunidad organizó una excursión, un excursus, una distracción, una fuga...dice un autor al que no quiero citar que en cada niño humano que nace se hace un trabajo ímprobo para poner al día al sujeto. Milenios de conocimientos, de morales adquiridas, de soluciones culturales para refinar al mono primitivo, son impresos en el cerebro en blanco. Pero, por supuesto, esta tarea tiene sus límites.
Y es por eso que en el día de hoy dejamos libros y bolígrafos, números y conceptos y fuimos a un parque de recreo semi-rural, conocido como "el bosc vertical". Situado cerca del municipio de Dosruis, este lugar permite hacer el mono durante algunas horas. Tirolinas, plataformas, troncos, redes para mitigar la caídas permiten a los jóvenes que a diario tienen que sufrir el arduo proceso de socialización/civilización gritar, saltar, trepar,etc. Eso sí, con supervisión adulta, bien atados con el arnés y siguiendo normas y caminos pautados. Las sendas están delimitadas por unas cuerdas y es evidente que el monte está perfectamente acondicionado para la disgresión.Se trata pues de una leve compensación, tormenta de una noche de verano...
Yo llevo un ensayo que puedo terminar deprisa sobre las culturas fracasadas. También fui pertrechado de La vanguardia. El tam-tam de los minutos se va mezclando con las historias de las FARC, el alejamiento de Irlanda del vaticano, algunos atentados en Nigeria, la contiendo electoral local inminente, alguna presentación de un libro de Eduardo Mendoza en Seix y Barral...los ratos intermitentes de lectura se ven sazonados de una conversación interesante con la profesora MA, de catalán. Gente del teatro, comentamos con ella la guerra civil, las múltiples caras del catalanismo, las últimas obras del TNC, el problema de la editorial Moll en Mallorca, el blaverismo valenciano+la épica vida del ultracorrupto Monsieur Fabra, el catalán de L'Alguer y la catalunya Nord, la situación lingüística en el Reino de Valencia y un largo etcétera. El día va pasando...ya cansados de tanto tarzanismo vamos a comer un bocadillo rápido. Sin más actividades programadas damos una vuelta hacia ninguna parte. Hemos de llegar al colegio a las 17h, hora oficial en hasta la que el funcionario se compromete en esta comunidad autónoma a tener entretenida a la canalla. La vacuidad de los últimos instantes se pasa con chismorreos, comentarios intrascendentes sobre el tiempo, danza del kuduro y otros engendros de la MTV surgidos de los móviles de los alumnos, algún conflicto menor y cosas por el estilo. Cumplida la tarea de comulgar con la naturaleza regresamos. Mañana, indefectiblemente, retornará la letra, el polinomio y el camino hacia la ilustración.
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