Yesterday i went to see...and exhibition. Se trata de la no ininteresante Escher in het paleis(http://www.escherinhetpaleis.nl/). No sabía que este dibujante, tallador e imaginador de mundos imposibles fuera holandés.
Cerca de un parque que está próximo al Binnenhof (Dutch, literally "inner court") , se ubica en un palacio de pequeñas dimensiones que fue usado por la familia real de los Países Bajos. Pagamos los 8 pavos de rigor y entramos en un cosmos mágico. Leemos en los paneles un poco de la vida del artista, aunque en ningún lugar especifica que fue realmente un vividor, al no tener prácticamente ingresos propios hasta pasado los cincuenta. Agradezcamos por lo tanto al patrimonio de sus padres su obra. Se casó joven y también pronto adquirió la manía comprensible de salir de la gris Hollandia. Le gustaba especialmente Italia, sobre todo el Sur. Amaba representar esos pueblos tranquilos que se construyen creando formas laberínticas en las laderas de las montañas. De vez en cuando volvía a su país y trataba de conseguir algunos encargos.
También me pareció atractivo el hincapié que se hace del impacto que significó su contacto con la Alhambra de la que valoró especialmente los mosaicos que luego convertiría en sus famosos teselados. Especialista en generar los espacios imposibles que veía en sus sueños, le apasionó la tarea de crear imposibles. Reflejos de espejos que deforman el espacio tiempo, ilusiones ópticas, confusión de planos. Todo le sirve para reflexionar sobre la dualidad del mundo, sobre la eternidad y el infinito, esas dos quimeras que los seres humanos no pueden dejar de buscar aunque sean conscientes(?!)claramente de su incapacidad para crearlos o siquiera experimentarlos. Tal y como dice wiki, su obra interesó a muchos matemáticos. Y es que el arte de MC tiene algo de telúrico-exploratorio: las manos se pintan a si mismas, los lagartos dibujados salen del papel para recorrer la habitación volviendo a su lugar, las ciudades del bien siempre son contrarrestadas por las del mal, mil animales se multiplican dialécticamente hasta el infinito. ¿No nos recuerda este dentro fuera a la lucha que, seguramente, tendría MC en su interior que le llevaba a amar sus tardes Holandesas de fría y lluvia y al mismo tiempo odiarlas y buscar al sol exterior de Sur?. Seguimos pues pensando un poco en este país de bicis, barcos y canales. El infinito que nosotros buscamos, el imposible necesario de Balibard, se llama Europa y también se pierde ensimismado en sus múltiples reflejos que distorsionan su unidad, tan buscada como insuficiente. Y es que en nederlandés regalo se dice cadeau y acontecimiento événement. ¿Dónde está en Volken van Europa?.
PD sigo mis búsqueda de naranjas valencianas. Por ahora sin éxito: Sudáfrica y Perú son las procedencias más comunes.
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