UNA CHARLA MÁS QUE MENOS

Como hace algunos Martes hacemos una breve reseña de los eventos e historias de estos dos días pasados. Fui al cccb el Lunes y la charla volvió a ser decepcionante. El ciclo, que según lo que rezaba el folleto, iba y va de las virtudes políticas clásicas del republicanismos, a saber: prudencia, valentía, verdad, paciencia, justicia...no obstante, los ponente se están extendiendo en desviaciones que tergiversan el propósito anunciado. Si la semana pasada tuvimos que soportar las disgresiones de un búlgaro que en francés hizo un panfleto anti EEUU que nada o quasi nada tenía que ver con la prudencia, ayer una señora de Nueva Zelanda nos deleitó con una bien construida charlilla sobre la fortaleza, pero sobre la fortaleza del individuo ante el dolor personal. Médicos, sufrimientos personales, amputaciones sin anestesia, pesares y muertes infantiles sazonadas con oraciones al niño jesús. Esta vez me quedé hasta el final más que nada por el buen inglés y el esfuezo de la solícita ponente que nos ilustrada a golpe de power point. Sobre la fortaleza cívica que tanto necesitamos en estos tiempos de crisis bancaria y moral ni una palabra. Al final todos salimos aliviados pensando que existe la aspirina y la anestesia y nos quedó claro todo un mundo de miserias que en parte quedó atrás. Hoy, lejos de los grandes auditorios del CCCB, con sus micros, sus cámaras que trasnmiten en streaming a Wisconsin(por si alguien se perdió yendo al caucus de los republicanos), las traducciones simultáneas y los bobó con corbatas, andamos a la biblioteca F. Bonnemaison. Dirigidos por nuestro nuevo prescriptos, butxaca.com, caímos en la presentación de libro las maravillas. Yo pensaba que hablaríamos de Marco Polo, pero no, un autor ignoto había elegido el mismo título que el bueno del italiano, que escribiera su magnífico y maravilloso relato, también conocido como "El libro de los millones", según nos dice el autor, por que todas las cosas que en él salían se podían contar por millones. El público, unas siete personas, se sienta en una sala de biblioteca vieja. El edificio es antiguo y tiene una de esas entradas típicas de los barrios antiguos de barcelona(está en Sant Pere mes baix,7)con patio y escalera a un lateral. Tenemos un entrevistador introductor joven que analiza con pasión la novela. Hablamos de la memoria, del memento moris, del papel de los viajes interiores y geográficos y de los trucos del narrador. Fue breve pero el diálogo fue más real e interesante que el del CCCB. Por último, solo quiero comentar que estuve en la Laie de Pau Claris 85. Bien ordenada, gira entorno en base a las humanidades y la literatura. Un espacio agradable y una cafetería concurrida, libresca y coqueta. Compré un libro sobre Amazón. A reveure...