Quentin la ha vuelto a liar...ayer, tras una vueltecita por Sarrià (descubrí cosas guays, parques inéditos en el entor de la avinguda de J.V.Foix, bajando en el metro de los ricos L6 de Reina Elisanda, tengo que volver) una vueltecita por Sarrià decía, fui al cine Gran Sarrià a ver "Los 8 odiosos", la última cinta del sangriento Quentin..
No sabía que duraba 3h y no se me hizo larga, quizás le sobre media hora pero bien. ¿De qué va el film?...primero tenemos al frío como protagonista indirecto total, omnipresente. La ventisca, la puta ventisca lo altera todo, hace que hombres que no tenían mucho que ver unan su camino...se necesitan unos a otros ya sean cazarecompensas o sheriff de redrock.
La ventisca, el frío, es la primera metáfora: la naturaleza es hostil y lleva al hombre que es lobo para el hombre a necesitar unirse con otros en la ya consabida "insociable sociabilidad", en el imposible necesario...siento como la alergia quita precisión a mis palabras pero bueno, es como la ventisca...
Los 8 odiosos es una película sobre EEUU, sobre la necesaria unidad de la nación entorno a los valores como la justicia. Los enfrentamientos Norte-Sur, negros-blancos, está bien reflejados...hasta el odio al mexicano está presente.
Los personajes son todos asesinos pero contínuamente se esfuerzan porque sus asesinatos sean legales o no mal vistos del todo por la sociedad...en el fondo todos quieren pasta y quedar bien, evitar la horca. De hecho el personaje "la horca" se caracteriza por su voluntad de que ahorquen a su los reos que el conduce al patíbulo...dentro del famoso "vivo o muerto" el prefiere entregar vivo al preso y ver como muere...
La única mujer protagonista creo que es una encarnación del diablo, del mal absoluto...por muchos que se la maltrate siempre persiste en su chulería, en su maldad y acaba casi matando a todos los que la iban a matar...terrible. ¿misoginia?...
Al final prevalece la justicia aunque la muerte sea general y, creemos, no quede ningún personaje vivo...Ahorcan a la mujer, a la culpable primigenea, a la que montando todo el cirio tanto en contra como a favor. Y lo hacen el negro y el sureño, últimos supervivientes de la auto-masacre. El sur y el norte, el negro y el antinegro, con el peso de su cuerpo cuelgan al mal mientras y luego leen una carta de Abraham Lincoln. Patria, justicia, presidente, reconciliación nacional...sangre sí, mucha sangre. Tración, mentira, asesinato pero, en el fondo de todo cierto sentido de las cosas más allá de la desnuda violencia de la ventisca. Bien Quentin, bien.
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